ZoetisEspaña

Nunca insistiremos bastante en la importancia de la desparasitación durante todo el año, por el bienestar de tu mascota y el de los humanos que compartís vuestro hogar con ellos.

Los cambios climáticos y la globalización han posibilitado que enfermedades y parásitos externos e internos “viajen” por todo el mundo poniendo en peligro la salud de nuestros animales de compañía. Y nuestras casas se han convertido en hábitats perfectamente válidos para estos minúsculos seres.

Además, cada vez más viajamos con nuestros animales , por lo que su exposición a parásitos externos o ectoparásitos se multiplica, poniendo en riesgo su calidad de vida. Ante cualquier cambio de comportamiento debemos hacernos al menos 4 preguntas, las del método RESP para la detección de riesgo de estar ante una infestación de parásitos externos:

• R de Residencia: ¿vive tu mascota en la ciudad o en el campo?
• E de Estilo de vida: ¿sale de casa tu mascota, viaja contigo ?
• S de Social: ¿tu mascota convive con otros animales, personas inmunodeprimidas o niños?
• P de Personal: ¿cuántos años tiene tu perro o gato? ¿Cuál es su estado reproductivo?

Si tras efectuar estas preguntas (con la colaboración de tu veterinario), estamos ante un caso sospechoso de infestación por parásitos externos, lo mejor será seguir el tratamiento que este nos recomiende. Si no, la amenaza permanecerá ahí, y tu perro o gato podrían sufrir en su piel y otros órganos las molestias y amenazas que los ectoparásitos producen.

Cómo saber más sobre los parásitos externos de nuestras mascotas

Hemos preparado unas fichas, nuestras cartas de parásitos, para que cuentes con toda la información posible sobre estos organismos y su capacidad de amenazar la salud de nuestros animales.

En las cartas podrás descubrir cuáles son las áreas españolas donde se pueden encontrar, su capacidad para transmitirnos enfermedades también a los humanos y muchos datos más, muy interesantes.

Parásitos externos: pulga del gato y pulga del perro

Estos ectoparásitos están extendidos por toda nuestra geografía, son especies muy difíciles de erradicar y prácticamente están activas todo el año. Quizá la pulga sea parásito externo más conocido, pero eso no impide que sea uno de los más molestos y persistentes.

Parásitos externos: garrapatas

Este animal que se alimenta de la sangre de nuestros gatos o perros cuenta con distintas especies presentes en nuestro territorio. La garrapata es un viejo conocido del que no podemos dejar de desconfiar. Te vamos a hablar de cuatro variedades:

• Garrapata marrón del perro
• Garrapata ornamental
• Garrapata del erizo
• Garrapata de la oveja

Parásitos externos: ácaros

Los ácaros son responsables de reacciones alérgicas en nuestras mascotas, que pueden ocasionarles muchas molestias y problemas de salud. Hemos incluido las cuatro variedades responsables de las principales infestaciones.

• Ácaros aradores
• Ácaro folicular canino
• Ácaro folicular
• Ácaro del oído

Parásitos externos: flebótomos

Los flebótomos son los responsables de enfermedades tan graves como la leishmaniosis, y son animales nocturnos muy parecidos a los mosquitos. En concreto en nuestras cartas te hablamos de los dos más relevantes en lo que a salud animal se refiere:

• Phlebotomus ariasi
• Phlebotomus perniciosus

Parásitos externos: piojo masticador felino

Este parásito no se sujeta a la estacionalidad, por lo que durante todo el año puede aparecer para amargar la vida de nuestro gato.

Con estas cartas de parásitos puedes reunir un montón de información sobre cómo actúan, dónde está el riesgo de contraerlos y qué consecuencias pueden tener para la salud de los animales y de los humanos con los que conviven.

Por desgracia su extensión es difícil de controlar debido a nuestra movilidad y la de nuestras mascotas. Incluso durante el confinamiento fue complicado debido a la movilidad de los animales que viven en libertad. Pero lo cierto es que insistir en los beneficios de la desparasitación durante todo el año es casi la única manera de proteger a nuestras mascotas.

Hoy en día existen múltiples tratamientos y tu veterinario sabrá aconsejarte cuál es el mejor para tu animal, y la forma en que se administran suele ser sencilla (pipetas, collares repelentes, etc.).

Pero para poder asegurar que los parásitos externos están contenidos, es imprescindible no bajar la guardia, ni siquiera en invierno.

Así que sigue las indicaciones de tu veterinario, administra los tratamientos de forma responsable y completa y disfruta de la tranquilidad de que tu mascota, tu familia y tu hogar estén en buenas condiciones para todos.