Adulto, Comportamiento, Conseperros, Salud
Lo que debes saber sobre la alergia de tu mascota en primavera
“La primavera, la sangre altera”, dice el dicho, y resulta que estas palabras son tan aplicables a nosotros mismos como a nuestras mascotas. Porque ellas, igual que nosotros, sufren alergias durante la primavera. En esta temporada el alérgeno más conocido es el polen, puesto que los diferentes tipos de plantas y de árboles entran en su período de polinización. La presencia de estos pólenes en el aire varía según las condiciones climáticas, pero lo que está claro es que sea más pronto o más tarde, ¡las alergias están a la orden del día en primavera!
Los dos villanos de la primavera
El polen es uno de los protagonistas del ambiente primaveral y eso lo notamos tanto quienes tenemos alergia como quienes no. Por tanto, si nuestros perritos o gatitos son alérgicos a estos granos, enseguida notaremos que empiezan a manifestar síntomas derivados. Este tipo de alergias producidas por la inhalación de determinados elementos alérgenos pueden provocar lesiones en la piel y picor en la piel de nuestro peludo, al mismo tiempo que se pueden notar síntomas como conjuntivitis, picor o asma. ¡Permanece atento y pide consejo a tu veterinario si ves algún síntoma fuera de lo normal!
Lavar con agua caliente el lugar donde duerme nuestra mascota una vez a la semana puede ayudarnos a luchar contra los parásitos
No obstante, los villanos por excelencia son los parásitos: Las pulgas, garrapatas y mosquitos que también campan a sus anchas a partir de este mes de marzo pueden provocar con su picadura una reacción alérgica en tu mascota, irritando e inflamando su piel. En algunos casos, incluso al utilizar los productos antipulgas pueden aparecerles también reacciones, por lo que te recomendamos que sigas las indicaciones del fabricante y del veterinario. Y recuerda, ¡no solo hay que estar alerta en primavera! Durante el año te recomendamos utilizar collares antiparásitos o pipetas.
A continuación te indicaremos algunos consejos básicos a tener en cuenta para evitar problemas en primavera:
Para tu gatito
Como ya comentamos anteriormente, para prevenir los parásitos externos que se encuentran en el pelaje, lo mejor es utilizar pipetas o sprays, siempre consultando antes con tu veterinario. Los collares antiparasitarios también son un medio de prevención que hemos utilizado toda la vida, pero estos pueden causar irritación en nuestro felino, por lo que en la medida de lo posible es mejor evitarlos.
Las zonas más propensas para albergar estos parásitos son las orejas, entre las almohadillas de los dedos, la base de la cola y debajo de los brazos y piernas.
Para tu perrito
Lo primero de todo, igual que para nosotros, es la higiene. Por ello, te aconsejamos bañar a tu peludo al menos una vez al mes y si la mayoría del tiempo lo pasa en el jardín es recomendable bañarlo cada 15 días. En este sentido, y para mantener a tu perrito limpio y poder observar concienzudamente si existe algún que otro parásito en su pelaje es recomendable un cepillado frecuente.
Aparte, siempre hay que potenciar los cuidados preventivos si nuestro peludo accede a zonas de campo y bosque: con la llegada de la primavera, los parásitos acechan en estos lugares. Igual que nos ocurre a nosotros con los mosquitos, sin ir más lejos.
Por último, y esto es aplicable tanto a perritos como a gatitos, es aconsejable lavar su cama o el sitio donde duerman con agua caliente una vez a la semana, por si hubiera huevos de parásitos, así se eliminan con mayor eficacia.
En conclusión...
Según la zona donde residamos y la época del año, existen en el mercado una amplia gama de productos eficaces que ayudarán a mantener la salud y bienestar de nuestros peludos y felinos. El tratamiento será diferente en cada uno, claro: Por ejemplo, si un gato vive en un piso y no sale al exterior, no necesitará una protección tan completa como otro que tenga acceso al jardín.
Por lo tanto, recomendamos siempre consultar a tu veterinario ante cualquier duda o al mínimo síntoma que notemos en nuestra mascota.
La primavera, que cante o que llore, no viene nunca sin flores.