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Cómo enseñar a tus hijos a respetar a los animales
El pasado 4 de octubre fue el Día Mundial de los Animales y por eso queremos dedicar este artículo a resaltar la importancia de educar a los más pequeños para que cuiden de la naturaleza, sus animales y en especial de nuestras mascotas. Generalmente los niños nacen con la noción del respeto animal, pero algunos no saben aún cómo relacionarse con ellos y suelen ser algo bruscos, por eso deben aprender a ser bondadosos con otros seres vivos. Aquí te damos algunos consejos.
La educación de los más pequeños es la mejor herramienta para construir un mundo donde los animales y las mascotas estén siempre rodeadas de cariño y respeto.
Da el ejemplo: Como norma general de la enseñanza, lo más importante es predicar con el ejemplo. Sé consecuente con tus actos. Si quieres que tus hijos respeten a los animales, que te vean a ti tratándoles con cariño, tanto a las mascotas de casa como a cualquier animal en otro contexto como puede ser una granja, un bosque o la playa. ¡El amor por los animales debe ser incondicional!
Involúcralos en el cuidado diario: Si tienes una mascota en casa deja que tus hijos participen activamente en su cuidado. Según su edad, puedes darles diferentes responsabilidades como llenar el comedero y el bebedero, limpiar las heces o llevarlo de la correa en los paseos. Si desde pequeños inculcamos esta responsabilidad por otro ser vivo, con los años tus hijos podrán aumentar la cantidad de tareas, como llevarle al veterinario, bañarle o darle medicamentos si es necesario. Esto ayudará a crear lazos fuertes y fomentar el amor hacia los animales.
Enséñale a respetar el espacio de tu mascota: Tus hijos deben saber que, como todo ser vivo, tu mascota también tiene una forma de ser y una personalidad. Si tu mascota no quiere ser molestada, es importante que se le respete. Enséñale a tu hijo cómo debe actuar en situaciones donde tu mascota no esté de buen humor para evitar que se asusten en caso de gruñidos o arañazos. A un animal nunca se le debe tratar con violencia, siempre con paciencia.
Contacto constante: Si no tienes mascota en casa puedes visitar santuarios de animales en los que tus hijos puedan explorar y tener contacto con ellos. También puedes llevarles a parques naturales y dejar que entren en contacto con aves, insectos o cualquier animal que no represente ningún peligro para ellos. En la medida de lo posible lo ideal es que vean a los animales en su hábitat natural y en libertad.
La educación de los más pequeños es la mejor herramienta para construir un mundo donde los animales y las mascotas estén siempre rodeadas de cariño y respeto, porque como humanidad tenemos la responsabilidad de cuidarles y ayudarles a tener la mejor calidad de vida posible. ¡Únete al movimiento #RESPET siguiendo estos consejos y compartiéndolos con tus seres queridos!