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Cuidados de tu mascota durante el otoño
Con la llegada de cada estación llegan también cambios que afectan tanto a humanos como a mascotas. En el caso del otoño, bajan las temperaturas, disminuyen las horas de luz, vuelve la rutina y con ella los chequeos veterinarios, el control de vacunas y la desparasitación. Así que lo mejor es estar informado para evitar que nuestro amigo peludo llegue a tener algún problema de salud. ¡Aquí te traemos unos consejos!
Muda de pelo:
Como pasa con los humanos, con el frío hace que se baje las defensas y que el sistema inmune se debilite. Esto puede hacer que tu mascota pueda coger un resfriado ya que es más vulnerable a virus y bacterias.
En verano tu mascota suele tener un pelo más fino debido a las altas temperaturas, es por eso que cuando bajan las temperaturas al llegar el otoño este pelo más fino se cae para dar lugar a una pelusa más densa que le ayudará a protegerse del frío. Dependiendo de su pelaje deberás cepillarlo desde dos veces por semana hasta diariamente. Si no le ayudamos con este cambio de pelo se pueden formar nudos que dejarán que el pelo grueso aparezca, pueden aparecer picores y hasta caspa.
Resfriados:
Como pasa con los humanos, el frío hace que se bajen las defensas y que el sistema inmune se debilite. Esto puede hacer que tu mascota pueda coger un resfriado ya que es más vulnerable a virus y bacterias. Si ves que aparece algún problema respiratorio leve, lo más conveniente es consultar con tu veterinario para evitar complicaciones que puedan afectar a sus pulmones. Abrígale cuando salga a la calle y seca su pelaje muy bien para evitar cualquier acumulación de humedad.
Alergias:
La caída de las hojas y su barrido aumenta la cantidad de polvo suspendido en el aire, por lo que pueden aparecer alergias tanto respiratorias como el asma como cutáneas como la dermatitis atópica. Puedes prevenir su aparición haciendo una limpieza frecuente de su entorno donde pueda acumularse el polvo como las moquetas, alfombras, cortinas y muebles. También puedes hacer uso de purificadores de aire.
Tos de las perreras:
la traqueobronquitis infecciosa canina es una patología que afecta al sistema respiratorio y suele aparecer en lugares donde se concentran muchos perros, como las perreras o los criaderos. Su síntoma principal es la tos seca, ronca, fuerte y constante. También puede presentarse una ligera expectoración de secreciones, algo que puede ser confundido con un vómito leve. Tu perro puede presentarse decaído y llegar a tener fiebre. Tiene un alto índice de contagio por lo que la prevención es la mejor solución: en esta época debes consultar a tu veterinario para que le aplique la vacuna correspondiente.
Artrosis y artritis:
El frío puede provocar que las mascotas mayores y aquellas que tengan problemas en los huesos como artrosis y artritis presenten dolores. Controla su peso, bríndale una buena alimentación y ayúdale a realizar ejercicio controlado. También puedes mitigar estos dolores con el medicamento adecuado. Pregunta a tu veterinario por la posibilidad de controlar la artrosis con un tratamiento mensual. ¡Siempre con la dosis de respeto!
La prevención siempre es la mejor solución, por eso es importante que ante cualquier síntoma acudas a tu veterinario. Ayuda a tu mascota a disfrutar de esta temporada al máximo y obsérvala muy bien ante cualquier cambio de conducta, en su apetito y su estado de ánimo.